Jamie Spears, padre de la estrella del pop Britney Spears, renuncia a la tutela legal luego de 13 años de tener el control total en tomas de decisiones personales, profesionales, reproductivas y financiera de su hija.
Después de un año de intensas batallas legal el progenitor de Spears comunicó este jueves que va a renunciar a la custodia legal de su hija, aunque no ha fijado una fecha.
El abogado de Jamie Spears presentó documentos legales en los que dice que no cree que una batalla pública con su hija por ser su tutor sea lo mejor para ella. Así que decidió no seguir con la tutela.
Esto no significa que el amparo de Britney Spears quede anulado, al menos por ahora, pero ya no quedará en manos de su padre.
Durante los últimos meses, Britney emprendió una lucha legal y pública para recuperar control su vida.
En otro tenor, el abogado de la cantante dijo que las acciones legales en contra de Jamie Spears van a llevarse a cabo como ya había previsto la estrella del pop.
“Seguiremos adelante con la investigación sobre la conducta del señor Spears durante los últimos 13 años, durante los que cosechó millones de dólares de la herencia de su hija. Espero tomar la declaración jurada del señor Spears en un futuro cercano”, expresó el jurista.
Desde 2008 que Jamie Spears, junto a un fideicomiso, ha supervisado por decisión judicial las finanzas, la agenda y hasta los detalles más mínimo de la vida de su hija , de 39 años de edad, después de que esta sufriera un colapso nervioso cuando se encontraba en el huracán del ojo público.
Se recuerda que Jamie Spears, de 68 años, cobra 16.000 dólares (más de 13.400 euros) mensuales por ser el guardián legal de su hija.